Salvada

Anoche salí preocupada (que raro) de la oficina, porque resulta que el arquitecto de la obra foránea me había hablado el viernes o jueves para decirme de unos detalles, a mi por las prisas, mi estado lunar y demás no encontraba momento para comunicarselo a mi jefe, total que por fin ayer tuvo un espacio, le dije y bueno me dijo que cómo lo había hecho a sus espaldas (que término tan drámatico y telenovelesco), le dije no fue a sus espaldas porque la idea no era manterlo y hacerlooculto, sino que no había habido tiempo porque si lo vieran como entrá corriendo, hablá como spiri gonzález, tan rápido da las intrucciones y se va corriendo, con tanta buya mental, cuando veo ya se me había escapado otra vez y yo sin comentarle, apenas y tiempo para decirle lo "urgente" . De todas maneras, ya me voy a anotar todo así en una lista para que no me vuelva a pasar, con o sin prisa se lo tengo que decir, importé o no. Me preguntó los detalles, pero me pidió entonces confirmara que lo hubieran hecho así ( como se debe) o habían metido la pata ya en la obra. 

Salí y tenía ganas de llamarle en ese mismo momento al arqui de allá, lo cual no podía porque el si a las seis en punto se va y yo venía saliendo de la oficina casi a las 8 de la noche.  Entonces me dormí pensando nada más en ese detalle, que si ya lo habían hecho "mal" habría que desmontar todo, se haría un lío, llegando a casa se lo conté a mi primo y  hasta a mi amigo O que me habló desde los yunites, se eneteró, pero como el es tan chistoso yo nada más reí con él y me decía " ya olvidate de eso, mañana voy yo y lo arreglo " . Pero esta mañana, fue lo primero que hice cuando llegué a la oficina, le llamé al arquitecto para corroborar lo que me había dicho y entonces mi alma descanso, me dijo " la reducción nada más se hace en la mocheta del muro de los closets, lo demás queda igual, ni lo hemos hecho" phewwwwwwwwww, mi alma descansó.