jueves, agosto 25, 2011

Come galletas



Tengo que portarme muy bien pues en los últimos meses he comido como si el mundo se me fuera a acabar. Tal vez sí, pero no quiero llegar rodando al menos jajaja. Mi rutina de ejercicios a sido intermitente lo cual ha hecho esa expansión de mi misma que si no fuera por las telas "strech" creo que ya no me quedaría nada! 
Ciertos días en el mes, cuando vuelvo a la normalidad "relativa" hormonal, me aprovecho de esos días porque me hago consciente de todo lo que he venido comiendo, recapacito y me porto bien. Aún no llego a mi límite, pero para qué alcanzarlo, si tanto trabajo me ha costado mantenerme, bueno mejor dicho ha sido muy fácil romper la buena alimentación y darle rienda suelta a mis antojos, lo difícil ha sido no caer en la glotonería. 
La peor parte, fue cuando estaba trabajando desde casa, fue algo así como un mes creo, tenía la idea de que sería diferente, pero no lo fue, me había comprado además un bote de minigalletitas que  no dejaba de comerlas. Pero es que es tan rica la comida. Pensé que estando en mi casa lograría poder prepararme yo misma algo super nutritivo, pero creo que estaba más ocupada que estando en la oficina, el estrés que se me acumulo mayor porque todo era vía telefónica y en esta chamba existen muchas cosas que por esa vía se complican y se prestan para muchas confusiones.
Ya se me acabaron esas galletitas pero la buena noticia es que las he vuelto a ver, las voy a visitar a la tienda pero sólo a eso, me resisto de comprarlas, hasta ahora lo he logrado.  Entonces mi sueño de cocinar no se me dió con todo y mis libros y revistas, ni me acerque a la cocina en ese tiempo. 
Un viernes que estábamos comiendo con el inge ( sin saber que sería el del gur bai ) contaba él que si en algo no escatimaba era en la comida, que para eso trabajábamos tanto, al menos para disfrutar de una buena comida, porque es todo un placer. Todos en la mesa coincidimos con él. Mar añadió la frase de su tío " la vida es comer" , bueno el si que la lleva al extremo. Todo con moderación claro está porque tanto el tío como el inge tienen una complexión saludable. De hecho el inge, a veces se iba a la reconocida panadería que está a la vuelta, a comprarse unos panes, como yo siempre estaba a dieta no me traía, hasta que un día de tantos me dijo " aunque sea una vez acéptame un pan" y me comí una banderilla deliciosa entonces jajajaja. 
Tampoco he vuelto a comprar pop tarts, las cuales adoro. Pero sí el viernes fuimos a celebrar el cumple de amiga artista, nadie había cenado y quisieron ir a . Me tarde mucho mirando el menú para elegir lo que trajera menos, lo que fuera más saludable, sin irme a las lechugas porque no pagaría 200 pesos por un plato de lechuga que en el mercado me cuesta 5 pesos, eso sí que no. Entonces bueno mire y mire el menú hasta que dije esto no parece tan malo. Era un burrito de arrachera, eso que traía como tres pedacitos de carne pero aún así estaba delicioso! pero enorme, así que de las 3 partes, mi hermana se comió una yo otra y otra me la traje. De sólo acordarme se me derrite la boca.
Luego el sábado después de la misa de mi tía, con la familia, nos fuimos a cenar también. Mi familia es de pan, atole y tamales, por tradición. Así que para suerte nuestra, a lado de la iglesia, existe un local que vende " churros, tamales (normales y oaxaqueños) y atole".  Madre mía no quiero ni pensar en las calorías que el atole, el churro y el tamal "verde" (mis favoritos) tenían, como para la semana entera, pero que ricos estuvieron, en aquel momento ni lo pensé. Por ende, la otra vez que llegué del trabajo,  intente subirme a la escaladorá, digo una ayudadita a mi propio organismo no está de más, pero cayó una tormeta eléctrica que a cada rato me hacia brincar y salir huyendo, porque desde aquel rayo que cayó en la casa de mi vecino, sobre su palmera la cual incendio y yo sentía que ya se caía hacia mi casa sobre el tanque de gas y explotábamos, entonces sigo aún con el temor de los mentados rayos y truenos. Casi que ví que cayó uno afuera de mi casa, se iluminó todo, terminé por dejarlo para otro día.
Cuando uno menos lo necesita, resulta de que hay galletas en mi casa y en la oficina. Luego me dice el eléctrico que tiene una obra en Córdoba, yo " en dónde?", me repitió lo mismo, es nada más y nada menos que el lugar donde hacen esas galletas de café que son orgásmicas, sin dudarlo le dije " le encargo unas por fa" ! Ahí vive mi tía pero ya me da pena encargarle siempre unas. Tengo una reserva que no me he querido comer hasta que no tenga otras en mi poder.  Ahora que lo pienso que bueno que no me las he comido porque quiero llevarle a B unas para que las pruebe. Ay si ya tenía que salir B a relucir jaaaaaaaaaaa. 

3 comentarios:

todavia dijo...

Me encantan las galletas!!!! Pero extrañamente no las tradicionales galletas gringas de chispas de chocolate... son aguadas y demasiado dulces. Me gusta mas las que crujen! ñam!!

Ya no ves al inge?????

Millenia dijo...

No lo veo ya. Pero quedamos de que me daría un tour en su nuevo trabajo y de paso un cafecito, un sábado. No he tenido libres pero pronto espero.

;)

Millenia dijo...

Ah mi me gustan todo tipo de galletas, en todo tipo de presentaciónes, es más de últimas me ha dado por las dulces, remojarlas en leche y luego yam!