Timbres postales al cielo

El día transcurrió relativamente tranquilo, comparado con las dosis que he tenido de adrenalina y estrés, vaya que si lo fue. 

Desde anoche había quedado de verme con un ayudanto, es uno de los mejores amigos del hijo menor de mi jefe, la verdad me imagine que iba a ser otro junior insufrible, pero no! al menos como "compañero de trabajo" . Las cosas que tiene la vida, me gusto mucho desde el principio su sinceridad y ... como decirlo...-osh sí que tengo que leer más para poder encontrar las palabras adecuadas cuando quiere hacer descripciones- valor? podría ser. Ya que se presento en la oficina, claro con las buenas referencias de su hijo, para comentar que este semestre por cuestiones monetarias -si lo sabré yo- no iba a poder ir a la uni así que quería ponerse a trabajar ya que estudia.... arquitectura. 

Yo creo que si la hará de arqui, al menos le veo muchas más ganas que al sobrino de mi jefe, ese que conté que también anduvo en las vacaciones acompañándome, pero el si de plano no hizo nada de nada, iba con una flojera, además el iba para ingeniero y veía todo nuestro trabajo así como de "fuchi" jaaaaaaaaaaaa. Si me lo hubiera preguntado yo le hubiera dicho a él que ya no sufriera, ni perdiera el tiempo, dinero y esfuerzo, que se metiera de modelo y la hacía muy bien porque es un muy guapo. 

Entonces bueno, el ayudanto chocó su auto hace tres semanas, pobre, ser poco el amor y gastarlo en celos, como diría el dicho, digo es que uno no está como para andar pagando golpes ni a su mismo auto, pero así sucedió, así que anda en "taxi" así que como vive camino a mi casa, me había pedido aventón, o sea si lo veía en un punto para de ahí irnos juntos, le dije que sí. Me lo había dicho en tres ocasiones anteriores, pero las dos me las cancelo porque se le había olvidado que tenía que ir a ver precisamente su auto y la otra yo no iba a la oficina, tenía que pasar a la obra primero, así que no había tenido oportunidad realmente de llevarlo. Hasta este día. 

Llegando a la oficina el tomó otro taxi para la obra, la verdad venía apurada y no me pasó por la mente, llevarlo hasta la obra, no estaba tan lejos pero lo pensé ya que estaba dentro del estacionamiento. De ahí me puse a ver unas cosas con la contadora, un compendió que al final cuando llegó el jefe lo cambió, mejor que quedará como el lo quería porque el formato que le dimos nosotras no le gusto, de cualquier forma sirvió para ver que aún faltaban algunos pagos, que yo rectificara y confirmara otros.

Lo único es que pesar de que desayuné bien, luego a media mañana me tomé un yogur, dieron las 3 pm y seguíamos con el jefe, me crujía la tripa realmente y tuve que ir a la cocinita para comerme unas galletas, justo ahora que las ando evitando por obvias razones. 

Por fin se fue el jefe, para dejarnos comer y descansamos un rato, para luego seguirle. Por ahí de las 5.20 me salí para ir a la nueva obra a entregarle unas hojas al maestro ( siempre decía maístro porque me cae de variedad la palabra pero estoy tratando de escribir lo más correcta que pueda ). 

El maestro! eso me recuerda que ayer miércoles, me habla triste y preocupado, porque había ido alguien a sacarlo de la casa, sin razón, pero es que la vecina de a lado se quejó que el ruido, que había alguien y demás, así que fue un vigilante, como estamos en un fraccionamiento muy exclusivo, donde los residentes pagan cantidades elevadas de mantenimiento y vigilancia, les tienen que hacer caso -así vivan en la casa más fea y barata de la zona como en caso de esta vecina y sabrá dios si ella paga - total que el vigilante para justificar su trabajo, los sacó. Me dijo que tuvieron que bajar a la civilización y buscar un lugar donde quedarse. Me dio pena por ellos, porque si de por si ganan muy poco, se friegan tan poco y, luego les vienen a hacer esto sin justificación. Bueno esta mañana fue mi jefe a arreglar el asunto, no sé si hayan reprendido al vigilante por haberlo hecho, ya que mi jefe no se puede poner tan exigente por aquello de los permisos, sin embargo, el nuevo residente si se podría quejar y ahí se les llueve. 

Total a lo que iba con esta entrada, la razón principal es la siguiente. Llegue a la obra para entregar las hojas,  el maestro me pidió que fuera a donde estaban comenzando a demoler el piso, como hacía rato que no veía ese proyecto porque lo estaba haciendo el otro ayudanto, me despisté un poco jajajajaj que risa, porque llegó a la zona y les digo " para que están abriendo aquí, este muro no se va a demoler ! " la cara del maestro y del segundo encargado " no le hagaaaaaaaaaaaa a ver si no me metí en un problema". Les dije " bueno mejor traigo mi computadora y ahí revisamos todas las medias " . Los revisé y entonces me vinieron los flashazos a la mente, recordé que habíamos recorrido todo ese muro hacía la colindancia hasta antes de pasar la restricción de construcción, les dije " ahhhhh ya me acordé, este es el verdadero eje, nos recorremos entonces 1 mts " y les volvió la paz al alama. En eso estábamos todos riéndo de lo que habíamos dicho, el maestro me explicaba como iban a pasar la red de drenaje y todo eso que sería nuevo, cuando de repente me di cuenta de lo feliz que era haciendo eso, mirando los planos, hablando con los trabajadores, tomando medidas, imaginando como quedaría ya todo nuevo, me sentí muy feliz, porque los malos tratos y actitudes de mi jefe, serían nada comparado con lo contenta que estaba haciendo ahí, ese momento es para lo que estudie arquitectura. Quisiera no tener que dejar este trabajo, pero sé por otro lado las circunstancias económicas son otra cosa. Necesito un milagro!