viernes, abril 27, 2012

Maratones



Ayer a la hora de la comida le marqué al arqui para ver como seguía. El me contesto y charlamos por un rato, lo escuché ciertamente muy mejorado, a su voz de ultratumba de aquel martes, lo más importante, lo escuché animado, mi jefe le había hecho una llamada el día anterior y él la recordaba palabra por palabra, porque mi jefe para él es una persona muy importante en su vida. Me dió gusto escucharlo y que a pesar de todo en verdad el arqui tenga motivos para seguir en esta dimensión. 
En otros milagros, pues mi factura apareció, esa que tanto buscaba, finalmente a mi madre le entro el gusanito, vió un montoncito de papeles que no habíamos revisado a conciencia y voilá! ahí estaba. Ya la integré a todo el papelerío que le entregué a la contadora ya. 
En otros papeleos, ayer corrí y mucho, tomando en cuenta que nunca corró menos después de la cirugía, si ya sé, acabo de cumplir 4 meses ya y sigo así recordárndola como si hubiera sido ayer, pero todavía tengo secuelas, o sea, tengo una cicatriz que a veces duele, otra interna que a veces me da como piquetes, y todavía con todo y mis kilos extras, estoy inflamada. Que haga ejercicio dice el doctor, pero yo digo a qué hora? 
Total que ayer fui a entregar unos papeles, me salí a las 6.08 de la oficina, a mi jefe no le pareció, pero ya le había avisado, esta vez no me detendría por nada ni nadie, porque igual volvió a llegar a las 5.45 pm, es decir, quince minutos antes de nuestra hora de salida, con intenciones de seguir trabajando, y a mi me urgía entregar esos papeles. Me fui volando. 
Llegué  al  lugar en cuestión, no había donde esetacionarse, casi nunca hay en realidad, pero no podía ponerme detenidamente a buscar un lugar porque la ventanilla la cierran a las 6.45 pm y eran 6.30 pm, encontré un espacio en curva, pero me estacioné, no quedé bien pero era eso o que me cerraran. Me salí del auto y me fui corriendo hasta la ventanilla. Ahí una muchacha me presto su lápiz y pluma para llenar lo que me había faltado, porque por salir corriendo había dejado los míos en la oficina. Cuando tocó mi turno por fin me, la hizo de emoción el que atendía, primero no encontraba mi folder, después me dijo que tenía que traerle una carta con algunas específicaciones, por fortuna se me prendió el foco de pedirle los datos que debían traer esa carta, me dió el nombre, bien. Me fui corriendo a la coordinación del lugar a ver si me dejaban hacer la carta ahí, el secretario que es buena onda pero no tanto ( y silvestre hasta la pared de enfrente) pues me dió una carta y me mando sacarle copia, la fila de las copias era larga, pero hasta eso tarde como 7 minutos ahí parada para sacar 1 copia. (esta vez si traía dinero porque el otro día tuve que pedir). De ahí regresé con el secretario me dijo que ahora hiciera una igualita a esa pero con mis datos claro (vaya ayuda), pero no me permitió hacerla en su compu. Le dije que no tenía el dato de la fecha anterior, me dijo " igualita" eso quiso decir que tuve que regresar a la ventanilla a pedirle el dato de la fecha al que atendía, me lo dió! Me fui corriendo a la biblioteca, a la de la entrada le pregunté si había todavía máquinas de escribir, dijo que no sabía (y eso que trabaja ahí). Fui atrevesando toda la biblioteca hasta donde se suponía estaban las máquinas, de escribir, la del control me dijo que ya las habían quitado, que subiera a las computadoras de la planta alta. Corrí entonces, atravese toda la biblioteca tanto en planta baja como en la alta, llegué a las computadoras, me asignaron una y redacté la carta. La mandé imprimir y volví corriendo con el secretario, me la firmo y me puso un sello. Me fui corriendo de nuevo hacia la ventanilla a entregar la carta. Llegué sin aliento pero la entregué. De paso pregunté por un nip que me tenían que dar, pero la del escritorio me dijo que no, que no lo necesito (por ahora), el punto es que estos quieren que uno vaya por todo y en pausas, porque no me lo dío de una vez!!!! como si tuviera el tiempo del mundo. En fin ya había entregado lo otro que era lo que más urgía, ya que llevaba dos semanas de retraso, todo por un nombre. Tuve que volver aquella vez con el secretario y  el día que fuí no estaba para imprimirme las hojas, luego regresé y si estuvo pero el que no estuvo fue el otro que tenía que firmar, regrese otro día y lo encontré, pero ya me habían cerrado la ventanilla, y así se me pueden ir mil días.
Me empezó a doler la espalda, por dentro, por haber respirado tan mal y tan rápido en todos mis carreras. ( y mi mala condición?). El pie derecho me empezó a doler porque todo lo hice corriendo con zapatos de tacón.
Me acordé que al quedar tan mal estacionada me dije "sólo serán unos minutos en lo que entrego los papeles y luego luego me voy". Salí a las 8.15 de la noche de ahí, ví el reloj cuando iba hacia el estacionamiento por mi auto.

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