En el pasado los planos se podían retocar, si había faltado algo, rápidamente y sin rastro se podía agregar, si algo sobraba, de ser pequeño detalle se podía borrar casi imperceptible, pasando la prueba, siempre tenía en la mano estilografos que son las plumas especiales que se rellenan con tinta china para dibujar planos y una navaja, de las de doble filo, en su defecto un cuter de precisión. Si me sobraba una "s" se borraba, si le faltaba un eje, lo agregaba, ahora no es posible eso. Tengo casi que una sóla vez para que todo salga bien en la primera impresión, lo cual lo hace casi imposible, se me van ciertas cositas, que mis mil revisiónes anteriores sobre la pantalla el ojo no las detecto hasta ver el conjunto en papel. No me gusta nada!
Esta mañana estuve casi que en la silla eléctrica, no había cometido ningún delito, sólo me dedico a la arquitectura, la silla era la del sitio de ploteo de planos, una muy básica, clásica de muebles de oficina, forrada en tela negra, un tanto acolchonada. No emite descargas eléctricas, esas me las génera el estres de ver que pasan las horas si poder terminar de imprimir los más de 60 planos, con mi jefe por mensaje o vía secretaria cada determinado tiempo preguntandome que sí ya estaba todo listo. Fue una mañana excesivamente estresante, de las desearía no se repitieran pero que vuelven. Es la única razón por la que extraño a los vecinos de a lado, porque ellos sí tenían ploter para imprimir los planos, entonces iba, les dejaba mi usb, y ellos se encargaban de todo, si veían alguna anomalía me la notificaban, la corregíamos y voala.
Pero no, ahora ir a imprimir planos se vuelve siempre una pesadilla, está vez, no iba sólo con el tiempo contando, sino que un señor tenía que imprimir en otro tipo de papel, así que tuve que esperar para cuando el iba a mandar algo, esperar a que quitaran el rollo de papel bond, colocaran el de albanene, el señor mandara a imprimir una tanda, para después de un rato regresar a pedirle al encargado que me regresara por favor el otro rollo, mientras el señor no mandaba nada a imprimir. Mandé a imprimir algo así como 65 planos, a las tres cerraban la asociación, a las 3 estaba vuelta loca busccando mi tarjeta en mi bolsa para pagar, de las prisas no la encontré, nisquiera me dió pena de que después de marcarme todo, entre planos, copias y fotos, me cancelaran la cuenta, en lo único que podía pensar es como iba a pagar y lo que diría mi jefe. Pasaron unos minutos, en los que respire, me calme, de nuevo me dispuse a buscar la tarjeta en mi bolsa, despúes claro que nadie contesto mis llamadas, ni Mari, ni S, ni en la oficina, ni mi hermana, la única fue super G, la única que sabe que cargar el cel es vital hoy día. Con los intentos fallidos, entonces busqué de nuevo en mi bolsa, la encontré y me volví a formar por tercera ocasión. Al final era un mundo de planos, la cuenta la hice de acuerdo a mi lista, sin embargo al organizar todo una vez en la oficina, me dí cuenta de que habian faltado tres! eran los que sí mande imprimir pero nunca salieron porque en una de tantas alguien apago el ploter, habré sido yo misma que estaba cortando encima de él? o alguien ya me soñaba ahí y me lo apagó para hacerme la malora? o siemplemente se desconecto y ya?
Era para soñarme, claro a nadie le quitaba nada, yo mandaba plotear, me levantanba recogía los planos, los acomodaba para revisar las calidades de línea, los cortaba de ser necesario, ni los molesetaba, pero tal vez por estar invadiendo su espacio de trabajo por algo así de más de 5 horas! tal vez. Ni de comer me acordé en esos momentos. Aunque hubiera salido corriendo hacia la asociación dónde debía entregarlos, no estaban doblados, mis llamadas de que me esperaran fueron en vano, hasta pena me dió porque simplemente no era humanamente posible que en media hora yo doblora 65 planos, pero me negé. Obvio no me espero más de 15 minutos la ayudanta, que se vé que tiene una cara de pocos amigos, o sea no es mi culpa que su trabajo o servicio social, le haya tocado en la punta del cerro en medio de la nada con cero transporte público para accesar a él, que mejor guarde su amargura para más adelante cuando tenga más experiencia en lo que son las calamidades de la vida, 15 minutos no es nada, que diría ella que anoche no me quedé con mi jefe terminando algo ni 15 min, ni una hora, ni dos, ni tres, sino cuatro horas más allá de mi hora de salida, y eso porque creo que ya ninguno dábamos una.
Salí a las 3.30 pm pensando que hacer, lo más lógico sería, regresar a la oficina con todos el bonche de planos para doblarlos y con la pena pero ni aunque hubiera llegado a las 8 am en punto al centro de impresión, habría terminado para antes de que cerraran la asociación, mi jefe se viaja y yo junto con él. Lo comprobé porque desde las 4 pm hasta las 6pm estuvimos doblando planos, tres personas, ahí fue cuando me dí cuenta que me faltaban 3! y ahora que estoy en mi casa, me entró la duda si fueron esos tres nada más o faltarían más pero como se me bloqueo la mente ya ni me acuerdo, así que para esos tres tuve que regresar al centro de copiado porque si me los habían cobrado, de paso por la copia que me pidio el "maistro" albañil para los castillos, de la otra obra, que mi jefe quería que tuvieran vista de rayo lasser para ver entre las paredes jajaja para localizar los castillos, jejeje, pero habiendo un plano de eso porque no facilitarle las cosas a todos.
En fin si no había tomado mi tiempo de comida, pues todavía tenía media hora para hacerlo, no me daría tiempo de mucho, así que me pasé al automac, no pedí ensalda porque era lo último que quería después de esa mañana en la silla eléctrica, mi ritmo estaba todavía a mil, así que apenas me dieron la bolsa con la comida me arranque en el auto, no ví nunca mi bebida, sino casi llegando a la oficina pensé en ella porque la necesitaba para tomarme mis medicinas, sí las que ya se me había pasado la hora por estar ahí. Alcancé a las muchachas en las mesitas del super, comí rápido ahí, total comida o sin comer me iba a tocar camotiza. Pero le comente a mi jefe todo el asunto en versión resumida, no ardió Troya, simplemente es humanamente imposible que yo sóla hubiera terminado de doblar todo allá, dónde no hay nisiquiera el espacio para hacerlo, me las he ingeniado para tal pero en otras condiciones y con una octaba parte de la cantidad de está vez.
Mañana pretendo levantarme hipertemprano para llegar de igual manera a la ofician para corroborar si sólo faltaban esos tres planos que ya fui a imprimir a la salida de la oficina o si tengo que volar por los que falten, ya no tenía cabeza para más, lo juro. Afortunadamente el jarabe para la tos ya estoy en la última toma, que seguro era la que no me tomé a la hora de la comida por estar ahi en las prisas, pero con eso termino lo de la tos, mañana es la última toma de las otras pastillas que ya ni me acuerdo para que eran pero que segurito me han hecho bien y no han dejado que me desvanesca en momentos como este, sólo continúo con el antibiótico.
Pero no, ahora ir a imprimir planos se vuelve siempre una pesadilla, está vez, no iba sólo con el tiempo contando, sino que un señor tenía que imprimir en otro tipo de papel, así que tuve que esperar para cuando el iba a mandar algo, esperar a que quitaran el rollo de papel bond, colocaran el de albanene, el señor mandara a imprimir una tanda, para después de un rato regresar a pedirle al encargado que me regresara por favor el otro rollo, mientras el señor no mandaba nada a imprimir. Mandé a imprimir algo así como 65 planos, a las tres cerraban la asociación, a las 3 estaba vuelta loca busccando mi tarjeta en mi bolsa para pagar, de las prisas no la encontré, nisquiera me dió pena de que después de marcarme todo, entre planos, copias y fotos, me cancelaran la cuenta, en lo único que podía pensar es como iba a pagar y lo que diría mi jefe. Pasaron unos minutos, en los que respire, me calme, de nuevo me dispuse a buscar la tarjeta en mi bolsa, despúes claro que nadie contesto mis llamadas, ni Mari, ni S, ni en la oficina, ni mi hermana, la única fue super G, la única que sabe que cargar el cel es vital hoy día. Con los intentos fallidos, entonces busqué de nuevo en mi bolsa, la encontré y me volví a formar por tercera ocasión. Al final era un mundo de planos, la cuenta la hice de acuerdo a mi lista, sin embargo al organizar todo una vez en la oficina, me dí cuenta de que habian faltado tres! eran los que sí mande imprimir pero nunca salieron porque en una de tantas alguien apago el ploter, habré sido yo misma que estaba cortando encima de él? o alguien ya me soñaba ahí y me lo apagó para hacerme la malora? o siemplemente se desconecto y ya?
Era para soñarme, claro a nadie le quitaba nada, yo mandaba plotear, me levantanba recogía los planos, los acomodaba para revisar las calidades de línea, los cortaba de ser necesario, ni los molesetaba, pero tal vez por estar invadiendo su espacio de trabajo por algo así de más de 5 horas! tal vez. Ni de comer me acordé en esos momentos. Aunque hubiera salido corriendo hacia la asociación dónde debía entregarlos, no estaban doblados, mis llamadas de que me esperaran fueron en vano, hasta pena me dió porque simplemente no era humanamente posible que en media hora yo doblora 65 planos, pero me negé. Obvio no me espero más de 15 minutos la ayudanta, que se vé que tiene una cara de pocos amigos, o sea no es mi culpa que su trabajo o servicio social, le haya tocado en la punta del cerro en medio de la nada con cero transporte público para accesar a él, que mejor guarde su amargura para más adelante cuando tenga más experiencia en lo que son las calamidades de la vida, 15 minutos no es nada, que diría ella que anoche no me quedé con mi jefe terminando algo ni 15 min, ni una hora, ni dos, ni tres, sino cuatro horas más allá de mi hora de salida, y eso porque creo que ya ninguno dábamos una.
Salí a las 3.30 pm pensando que hacer, lo más lógico sería, regresar a la oficina con todos el bonche de planos para doblarlos y con la pena pero ni aunque hubiera llegado a las 8 am en punto al centro de impresión, habría terminado para antes de que cerraran la asociación, mi jefe se viaja y yo junto con él. Lo comprobé porque desde las 4 pm hasta las 6pm estuvimos doblando planos, tres personas, ahí fue cuando me dí cuenta que me faltaban 3! y ahora que estoy en mi casa, me entró la duda si fueron esos tres nada más o faltarían más pero como se me bloqueo la mente ya ni me acuerdo, así que para esos tres tuve que regresar al centro de copiado porque si me los habían cobrado, de paso por la copia que me pidio el "maistro" albañil para los castillos, de la otra obra, que mi jefe quería que tuvieran vista de rayo lasser para ver entre las paredes jajaja para localizar los castillos, jejeje, pero habiendo un plano de eso porque no facilitarle las cosas a todos.
En fin si no había tomado mi tiempo de comida, pues todavía tenía media hora para hacerlo, no me daría tiempo de mucho, así que me pasé al automac, no pedí ensalda porque era lo último que quería después de esa mañana en la silla eléctrica, mi ritmo estaba todavía a mil, así que apenas me dieron la bolsa con la comida me arranque en el auto, no ví nunca mi bebida, sino casi llegando a la oficina pensé en ella porque la necesitaba para tomarme mis medicinas, sí las que ya se me había pasado la hora por estar ahí. Alcancé a las muchachas en las mesitas del super, comí rápido ahí, total comida o sin comer me iba a tocar camotiza. Pero le comente a mi jefe todo el asunto en versión resumida, no ardió Troya, simplemente es humanamente imposible que yo sóla hubiera terminado de doblar todo allá, dónde no hay nisiquiera el espacio para hacerlo, me las he ingeniado para tal pero en otras condiciones y con una octaba parte de la cantidad de está vez.
Mañana pretendo levantarme hipertemprano para llegar de igual manera a la ofician para corroborar si sólo faltaban esos tres planos que ya fui a imprimir a la salida de la oficina o si tengo que volar por los que falten, ya no tenía cabeza para más, lo juro. Afortunadamente el jarabe para la tos ya estoy en la última toma, que seguro era la que no me tomé a la hora de la comida por estar ahi en las prisas, pero con eso termino lo de la tos, mañana es la última toma de las otras pastillas que ya ni me acuerdo para que eran pero que segurito me han hecho bien y no han dejado que me desvanesca en momentos como este, sólo continúo con el antibiótico.
2 comentarios:
Han inventado todo, menos una máquina dobladora de planos!!
Un besazo, Mille : )
La inventarán algún día?
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