Sorpendida estaba de ver aparecer al arqui en la oficina. Estaba yo en la recepción, tomando una llamada de mi clienta, con el barnizador parado frente a mí esperando respuesta, me había venido a entregar la llave, la bendita llave por la que hemos padecido todos. En eso estaba cuando paso mi vecino, tan lindo como siempre, no tardo en saludarnos a todos los presentes, a los pocos minutos estaba el arqui cruzando la puerta principal. Cuando lo ví sólo me vino a la mente una cosa " el show debe continuar" :P
S como es de esperarse le había preparado café y hasta un pan de dulce le tenía, los mismos que el arqui acepto contento. Así empezamos a revisar los planos.
Los planos, ya los había revisado varias veces sin embargo a la hora de irlos a plotear, encontré varias discrepancias que por fortuna pude darme cuenta, porque saldrían varias copias de cada uno. Me tomó menos tiempo del estimado, con todo y la versión en español del Autocad. Mar me quiso acompañar, aunque yo le dije que si quería irse adelantando, porque habíamos acordado comer en un puesto de tacos de un meracado sobre ruedas que se pone sólo los miércoles a lado de dónde voy a imprimir los planos. Como me la he vivido a "dieta" tenía mucho que no bajabamos a comer ahí, porque para imprimir lo venía haciendo con los de la oficina de a lado pero ahora que se fueron tengo que bajar a fuerzas.
Nunca había comido de esos tacos, hasta que entre a trabajar aquí y ellas, mis compañeras, me llevaron a la perdición . Tenía tanta hambre que olvide tomarles foto, el que yo pido es básicamente un bistek de carne adobada, servido sobre una tortilla recien hecha, encima le ponen papas a la francesa, pero como nos gustan tanto las papas, pedimos una orden extra.
Al final de la faena, mi jefe salió volando de la oficina y yo llevé al arqui a su casa. Después de una semana de no verla, llegué a la mía a ver la taranovela de pacotilla que sigo, la repetición porque salimos algo tarde de la oficina, no ha pasado mucho como lo sospeche, pero mientras la veía cene los últimos medallones árabes que me quedaban. Tendré que ir por más.
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