jueves, octubre 17, 2013

El mundo



Sigo con el despiste. Ayer me levanté a buena hora, me arreglé, desayuné, preparé mis comida para llevar y voilá me fui al trabajo. Tenía que ir a la oficina para recoger al arqui que me acompañaría a ver un depa que vamos a arreglar, y me ayudaría con el levantamiento. 
Pero antes tenía que pasar a la casa de materiales a pagar el material que me iban a enviar. Llegó contenta porque iba todo a buena hora, cuando una vez estacionada afuera del local de los materiales, busco mi cartera y nada! no la llevaba. La noche anterior la había sacado sabrá dios para qué y la deje sobre una silla del comedor, así que en la mañana cuando tomé mis cosas no la ví. Buuu. 
Afortunadamente la señora es muy amable, me cae bien y me dijo que no había problema y autorizó dejar el material a su trabajador en la obra. 
Para ir a ver el depa tenía que tomar un tramo de la carretera, le pregunté al arqui si íbamos antes o después por mi cartera porque no quería andar sin la licencia de conducir manejando así, máxime que iríamos a una zona que no conocía. Me dijo que mejor fuéramos primero por ella, así que me acompañó hasta mi casa y de ahí tomamos un atajo para tomar la carretera. Me gusta ir con el arqui de acompañante porque me va contando de temas muy variados. Entre los cuales me contó quién fue el que hizo una de las casas de un vecino! cuando yo todavía ni nacía! jajaja
La ultra cosa importante que me dijo es que menciono una cita que me pareció tan divina: 

De que le sirve al hombre ganar el mundo 
si pierde su alma 

Me llegó profundamente. Ahorita me encuentro en una etapa de tristeza, han pasado cosas que aún no logro superar. Espero un día pronto estar mejor. Esa frase me hizo pensar en tanto. Y es que entre otras cosas me siento saturada y a veces pienso en para qué todo lo que hago. Ni yo me estoy entendiendo últimamente. A veces no me parece el mundo en el que vivo. Mi despiste sigue, pero menos, esta vez casi olvido mi teléfono, me acordé dos cuadras después de la casa, pude retornar por él.