Se me ha ido la semana en trabajar y trabajar. Fuera de eso, estuve pendiente de preparar el regalo de M, después de lo que me retrase en la navidad debido a mi convalecencia de la gripe, no me podía dar ese lujo. Al menos creo que valió la pena tanta espera, le gusto.
Por cierto que me la he pasado monitoreando mi envió aquel de correo y desde el 2 de abril sigue en el aeropuerto, dice el que antiende el correo que dónde se detiene todo es en la aduana, como si hubiera mandado un paquete, si era sólo un sobre!, tal parece que llega más rápido uno al otro lado del mundo que aquí con mis vecinos del norti.
Así que estos días, cuando he regresado a mi casa, las pocas fuerzas que me quedan se me fueron como agua. Tengo varios temas pendientes en borrador, pero bueno espero poder subirlos una vez que los termine. No estoy tan perdida, pues el otro día escuche del gasto calórico que por ejemplo, los jugadores de ajedrez tiene durante un juego, es bastante considerado, a pesar de que toda la actividad es sólo mental. Así estoy yo, mi trabajo me quita todas las fuerzas, termino como exprimida del cerebro.
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